¿Estás pensando en reservar una habitación de hotel? En especial, si vas a tener una estancia medianamente prolongada en el tiempo, es muy probable que te sea de gran ayuda disponer de una cocina en tu habitación de hotel. Estos son algunos de los beneficios que puede reportarte contar con un lugar y elementos que te permitan cocinar en tu habitación.
El primero de ellos es la independencia que esto te genera. Imagínate, te levantas por la mañana muy temprano, aún casi ni has abierto los ojos, y te apetece un vaso de limonada bien fresca. Si dispones de una nevera en tu habitación, puedes preparar tu propia limonada y guardarla en ella o comprar previamente tu opción de supermercado favorita. De esta forma, podrás refrescarte en cuanto te levantes y disfrutar de ese delicioso sabor que te apasiona, sin tener que bajar hasta el restaurante o la cafetería del hotel. Ocurre lo mismo si lo primero que haces por la mañana es tomarte un café. Podrás hacerlo desde tu habitación, quizás hasta sentado en la cama, mientras lees el periódico, ves la tele, o realizas cualquier otra actividad.
Otra de las ventajas de disponer de una cocina en tu alojamiento es la capacidad que tienes para adaptar tus comidas a tu alimentación, ya sea tanto si consumes o no un tipo de alimentos o, si por ejemplo, estás llevando un plan de alimentación en el que debes comer ciertos alimentos o cantidades a determinadas horas del día, en las que probablemente la cocina del propio hotel no esté disponible. Por supuesto, cocinando en tu habitación también ahorrarás tiempo, ya que evitarás tener que esperar las largas colas que en ocasiones se generan a la hora del desayuno, el almuerzo y la cena en el buffet del hotel.
Pero… ¿Qué tipo de alimentos es más recomendable tener en esta cocina? Primero, debes pensar en tus necesidades, es decir, si como hemos mencionado antes es probable que tomes café por la mañana (o en cualquier otro momento del día). En ese caso, te recomendamos comprar un bote pequeño o sobres monodosis de café soluble, ¡te salvarán en más de una ocasión y el café conservará todo su aroma! Otros alimentos que también pueden serte útiles son embutidos, pan tostado, barritas de cereales, frutas y, en general, aquellos que sean de fácil almacenaje o cuya fecha de caducidad esté relativamente alejada en el tiempo. Por último, ¡asegúrate de no comprar en exceso! Es una pena que desperdicies comida si al finalizar tu estancia no te la llevas de la habitación, así que, compra poco a poco.
Por supuesto, si aunque dispongas de una cocina en tu habitación algún día no te apetece cocinar, o simplemente quieres dejarte mimar o probar la oferta gastronómica de la ciudad, siempre puedes buscar entre la multitud de ofertas de las que dispone la ciudad. Si te alojas en nuestro hotel o estás cerca de Sevilla, te recomendamos que reserves una mesa en el Restaurante GreenSuites Coffee, un lugar excepcional donde podrás degustar exquisitos platos tradicionales con un toque vanguardista.
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